El semestre pasado en la clase de plenaria tuvimos la actividad "Dossier" y a mi equipo le tocó desarrollar el tema del teatro isabelino. Me entusiasmó la idea puesto que para mí Shakespeare ha sido uno de los mayores representantes del teatro en esa época y a lo largo del tiempo se ha mantenido como icono del mismo. Investigando sobre ese tema en aquel momento supe que no solo se trataba de Shakespeare, que es el más popular, sino que había más autores como Kyd, Marlowe y Jhonson que incluso fueron influencia para él; que Shakespeare fue, además de director, actor; y una gran cantidad de datos respecto a la biografía de todos estos autores y del contexto general de esta época. Pero ahora que abordamos este tema en clase, hay cosas que me quedan claras como los estilos de algunos de los autores isabelinos ahora que estamos leyéndolos (La tragedia española de Kyd / El Fausto de Marlowe / Macbeth de Shakespeare, etc); también los antecedentes del denominado drama inglés y las características generales de todo este periodo. Cuando realicé el dossier no me dí el tiempo de leer mucho material (obras de teatro) y ahora me surgen dudas y también más información e ideas que pude en ese tiempo utilizar mejor. Sin embargo he aprendido cosas nuevas y he afianzado otras, como lo que vimos hace dos clases, el género TRAGEDIA. Una palabra que he escuchado infinidad de veces pero no me había quedado claro su verdadero origen, de lo que se compone y las diferentes etapas en las que éste género se ha hecho presente, desde que lo vimos en los griegos, romanos, hasta este punto, el teatro isabelino.
Cambiando un poco de tema, ahora que he leído Macbeth y Ricardo III noté que en la segunda los personajes que intervienen son basados en las verdaderas familias que han tomado el reinado de Inglaterra según la línea de tiempo de reyes que vimos al principio del tema, inclusive en el prólogo de la edición que leí escrito por Ma. Enriqueta González Padilla explica los antecedentes de la obra y cómo ésta se va desarrollando, a parte de la relación que tiene con obras escritas anteriormente por él. Según dice, estas tragedias no son totalmente realistas pues contienen más conflictos y relaciones personales ficticias pero aún así, sus contemporáneos las consideraban un tanto premonitorias (advertencias morales; por lo tanto tiene un carácter moralizante heredado del auto sacramental). Esto me gustaría verificarlo y si alguno de ustedes compañeros tiene algún dato relacionado con esto les agradecería que lo rolaran.
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ResponderEliminarCon respecto a las obras históricas, justo mencionó Joaquín que así como en épocas contemporáneas se retoman las historias verídicas pero hay cambios en favor de la ficción así ocurría entonces.
ResponderEliminarMe llama mucho la atención como el teatro isabelino responde precisamente a todo este historial de masacres por el poder. Cómo si en esta época buscaran reformar este pasado.